domingo, 25 de enero de 2009

A partir de mañana me tomaré esto como empezó, como un diario, y no como una especie de muro de las lamentaciones en el que se ha convertido.

A partir de mañana. Me temo lo mejor.

1 comentario:

Anónimo dijo...

bueno, todos tenemos nuestros días grises, azules y anaranjados... (¿sabes? siempre que pienso en el color naranja me vienen a la mente las calles de Madrid de noche...) y echarlo fuera no es malo, porque te desprendes un poquito de ello al escribirlo y dejarlo colgado por entre las redes de un blog...

:)

si te temes lo mejor, vas por el buen camino :)